Rebel'd Punk - Concierto en Fresno

La CIA se encuentra tras los pasos de las redes sociales, principalmente Twitter. Facebook es útil a la idiotez del sistema  y a los que comulgan con ella, no son idiotas solo en su trabajo, sino también en su tiempo "libre". Hasta hace unos días podíamos leer en los principales encabezados de los periódicos del país -que aún vale la pena leer- el anuncio de Anonymous con respecto a un boicoteo que realizarían a uno de los principales grupos narcoterroristas del país. 

Ahora se sabe que bastó una amenaza y un secuestro para reprimir a una organización que mucho bien hace para con la información específica en los medios de desinformación sistemática.

Para finales de la semana en que escribo esto (5/11), un hijo de puta ministro español se encontró en campaña para regular las redes sociales, el gobierno conservador de los Estados Unidos (estúpidos los que creyeron que un pinche hombrecito que renunció a su linaje afroamericano cambiaría el mundo) se encuentra temeroso por los movimientos civiles, profesionales y estudiantiles que se han manifestado en la casa de bolsa mundial , movimiento generado en Twitter. A mi parecer, el único beneficio político real de esas redes sociales es la organización  para el derrumbe de estos viejos edificios seudodemocráticos, una democracia federalista centralizada, excluyente e injusta. Twitter generó los movimientos de concientización poblacional que alimentaron la rebeldía en Medio Oriente. La humillación sufrida por Gadafi fue el prólogo de lo que le espera a la burguesía occidental.

Por ello, los pocos espacios que aún tiene la gente para organizarse y así tirar las viejas dictaduras en esta "nueva" libertad están a los ojos del estado para ser reguladas y así reducir la posibilidad de una subversión en estos estúpidos países social-demócratas apendejadores.  

El éxito de los medios educativos regulados por la burguesía (escuelas) es incuestionable. Hace unos días platiqué con una persona que ha sido completamente tragada por el carácter tecnocrático –hijo del pragmatismo británico- donde las empresas y su responsabilidad social no es más que un slogan más del sistema de explotación mundial, una moda para subsanar el discurso en tiempos de crisis económica, ideológica e individual. Tiempos que implementan la una forma moderna de tristeza como paradigma existencial.   

Mi deteste por el dogmatismo es directamente proporcional con el carácter cosmopolita de mis lecturas cotidianas. Y ello con mi calidad de vida donde la fortaleza de carácter alimenta mis finalidades; a eso le llaman –los dogmáticos con tono apelativo- idealismo. Quizás esa sea la razón directa por la cual el Diccionario del Diablo (obra realizada en el siglo XIX) define a las críticas hacia el idealismo como “la ignorancia de lo aparente”. Sumemos a esto las figuras que durante mi desarrollo he admirado, los reformadores sociales que son asesinados por el sistema, los mártires de las revoluciones intelectuales y sociales; por ejemplo, Isidore de Robespierre y Giordano Bruno.

Estoy convencido de que la vía electoral no es un medio genuino para el cambio; el proceso histórico mexicano es prueba fehaciente de ello, recomiendo las obras de Pablo G. Casanova y, el maestro, Cosio Villegas. A su vez, dos sínicos fraudes electorales (1988 y 2006) ya aceptados en el New York Times. Sumativo a lo anterior,  el caso de Venezuela  donde gobierna dictatorialmente  El Payaso de Latinoamérica, Hugo Chávez.  

Nuestro carácter civilizado genera los escalofríos ante la exposición directa a la sangre y el racionalismo politológico es tan enmarañado como las discusiones escolásticas, incluyendo –claro está- que los civilizados detestan el radicalismo. Por ello, son los barbaros y no los civilizados, los que pueden hacer que esto adquiera una carácter dinámico en un periodo de tiempo corto, aspectos –ambos- definitorios de lo revolucionario.   

Hace falta ser más salvajes y dirigir ese salvajismo hacia las arcas de la burguesía, hacia sus mujeres y sus hombres, también hacia sus hijos aun cuando sean menores de edad. Cuando seamos arrestados y asesinados por las marionetas del estado en cuestión de seguridad (la policía y el ejército), morir riendo, así como Bruno rió en medio del fuego del odio de la iglesia y su Santa Inquisición. 

Por fortuna es el país más poderoso en el cual se ha gestado uno de los movimientos que parecen presagiar la caída de esta seudodemocracia dirigida por una aristocracia dueña del dinero que ha mantenido durante decenios los estómagos hinchados por la desnutrición en África, una distribución inequitativa de la riqueza mundial y el carácter imperialista de este sistema que se ha legitimado en el imaginario social como "el mejor de los mundos posibles, el mundo civilizado". El movimiento, liderado por maestros y estudiantes, lleva el nombre  "Ocupemos Wall Street" (OWS, por su sigla en inglés), ha paralizado la bolsa de los EU y, ello aunado con la crisis en la economía del bloque europeo, la caída de las bolsas en todo el mundo. Ahora las letras de uno de los máximos exponentes de la ciencia social retoma su auge, K. Marx.

            Aquí la música de ambientación ante la masacre callejera de la burguesía y de sus escoltas (militares y policías). Ya llegará esa revuelta a México y estaré saqueando supermercados para tomar, y no comprando lo que nosotros mismos producimos. 

  

            

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